EL ADIOS DE UN CABALLERO

   




              EL ADIOS DE UN CABALLERO

         “Una serie de circunstancias que no es oportuno mencionar impiden desde hoy mi conexión directa con la explotación del ferro-carril Compostelano, de que hago cesión.

     No se renuncia,en verdad,a la empresa en que se han consumido los mejores días de la vida,prodigando esfuerzos de perseverancia y sacrificio de abnegación para darle forma y vitalidad,sin sentir alguna conmoción de ánimo, pero puedo lealmente asegurar que nada me impresiona tanto como separarme de antiguos empleados que en el largo período de 18 años,que a través de mil dificultades y vicisitudes, me ayudaron a llevar a feliz término el primer ferro-carril de Galicia; así como de los que,sin ser tan antiguos, no son menos dignos de mi constante gratitud, por sus muy recomendables comportamientos.   

     Al hacer entrega de la línea al Sr. Juan Trulock, representante de la Sociedad Crédit Company, y Gerente de la Compañía del ferro-carril Compostelano a la que desde ahora incumbe la explotación,si a los que en lo sucesivo, han de ser sus servidores,fuera preciso (que no lo es ) recomendarles sus deberes,mi última súplica sería que no desmintiesen en el servicio de la nueva empresa,el celo y la lealtad que bajo mi dependencia, acreditaron.

     Este acto nos separa definitivamente, y enviando a todos en general y a cada uno en particular mi afectuosa despedida,no puedo ofrecerles la seguridad de que el tiempo no logrará borrar nunca de mi memoria, el recuerdo de su adhesión,ni entibiar en mi pecho el afecto que les profeso. 

Su mas affmo. S.S.

Q.B.S.M.

Juan S. Mould

Carril,14 de Octubre de 1881. (&)



   

(&): Circular dirigida a los ex-empleados de Juan S. Mould.